Un niño TEA de 10 años que fue expulsado de su colegio en Concepción podrá volver al recinto según la Corte de Apelaciones penquista.
Recordemos que el caso del estudiante del colegio especial Chile España hizo noticia en las últimas semanas. Tras sufrir una desregulación, maniobras de contención incorrectas terminaron en más agitación y una agresión física.
Por la vía administrativa, el colegio determinó iniciar un proceso administrativo al amparo de la Ley 21.128, conocida como Aula Segura. En virtud de ello, se le suspendió y posteriormente canceló su matrícula para 2025.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos presentó un recurso de protección en favor del estudiante. La resolución determinó que se de pie atrás con su expulsión, y que el Servicio Local de Educación Pública Andalién Sur reserve su cupo mientras estos organismos apelan.
En Sala de Prensa recibimos el llamado de Carolina Burgos. Ella profundizó sobre cómo ocurrieron los actos que terminaron con su hijo en esta situación tan compleja.
Madre de niño TEA: “Lo que busco es que se respalde el derecho a la educación”
“Mi hijo tiene 10 años, tiene un diagnóstico de autismo, una discapacidad intelectual leve asociada y también tiene un trastorno de conducta”, comentó la madre. Ella acompaña todos los días a clases a su hijo, quien además es alumno único de su curso. El 22 de noviembre, “presentó una descompensación donde intervinieron nueve funcionarios del colegio para entre comillas tratar de controlar esta situación, lo cual se escapó de las manos” dijo.
“El colegio decidió llamar a Carabineros. Carabineros se presenta, a mí no me avisaron que llamaron a Carabineros y los funcionarios fueron a constatar lesiones a la mutual”, explicó. El colegio “luego de esto, el lunes 25 toman la determinación de iniciar investigación por la Ley Aula Segura”.
“Al mismo tiempo”, profundiza Carolina, “le suspendieron las clases por 10 días. La sanción que determinó el colegio fue cierre de año anticipado y la cancelación de matrícula para el año 2025”. El colegio no se habría apegado a la normativa, en cuanto a plazos de presentar documentos. El hijo de Carolina, fruto de esto, está fuera del sistema escolar. No puede ser matriculado en el colegio ni tampoco trasladado a otro.
La Superintendencia de Educación, en voz de la madre, consideró el castigo desproporcionado acorde a la situación. “Lo que yo espero es que se revoque la medida, es algo que no corresponde considerando el diagnóstico que él presenta y la edad que tiene. Busqué en el INDH, porque ya había tocado varias puertas antes como el SENADIS o clínicas jurídicas de la zona que tampoco acogieron la solicitud, al igual que la Defensoría de la Niñez”.
“En el INDH me brindaron el apoyo legal producto de lo que estaba pasando. Lo que busco es que se respalde el derecho a la educación y que se puedan hacer los ajustes necesarios”. Carolina es certera. “Hay muchos niños que están fuera del sistema educativo con características similares a mi hijo. Espero que eso no vuelva a pasar, que a ningún niño se le aplique la ley Aula Segura en una descompensación”. Incluso, fue más allá. “El colegio tiene varias otras denuncias por distintas situaciones, no es la única que ha pasado”, finalizó.