Los Saltos del Laja deben ser una de las dos o tres imágenes turísticas más reconocibles de nuestro país e indudablemente la más importante de la Región del Biobío.
En temporada alta se estima que unas 30 mil personas al día pueden llegar a este lugar para disfrutar de la hermosura de las caídas de agua. Para hablar de este tema, primero señalar que no es una, sino 4 las cascadas las que componen los Salto del Laja.
El salto principal se puede observar desde la carretera, tiene una altura de 35 metros, la segunda caída que se encuentra a un costado de la cascada principal tiene una altura de 26 metros, el tercer salto se ubica en el km. 1 del camino al sector conocido como Paraguay y tiene 25 metros de caída y es el denominado “Salto Chico”. Finalmente la cuarta cascada se encuentra en la parte posterior a este último, con una altura de 20 metros.
La siguiente es una nota audiovisual elaborada por el Canal de Youtube de Sala de Prensa con imágenes actuales de las cascadas y la explicación de la formación de los Saltos del Laja.
El origen volcánico de los Saltos del Laja
Como no ocurre en ningún otro punto del país este atractivo turístico se lo disputan 3 comunas: Los Ángeles, Cabrero y Yumbel. Eso evidentemente ha dificultado las acciones que se han destinado para mejorar este destino turístico.
Para conocer como se hizo la cascada de agua contactamos a Edilia Jaque, ella es geógrafa de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Geografía de la U. de Concepción. Tiene además un doctorado en Ciencias Medioambientales.
Jaque recibió a Sala de Prensa y explicó cómo nacieron estas cascadas. El fenómeno que dio vida a los Saltos está directamente relacionado con el gran volcán Antuco.
Este volcán hace unos 10 mil años era otro, era un gigante y sus erupciones cambiaron para siempre la geografía del territorio de la Región del Biobío y por cierto fue además uno de los grandes responsables de que hoy podamos disfrutar de los Saltos del Laja.
Edilia Jaque afirma: “para entender la construcción de este salto tenemos que pensar que este gran volcán que tenemos en la cordillera andina que es el volcán Antuco ha tenido en el tiempo geológico una serie de procesos eruptivos”.
Efectivamente el Antuco es un volcán técnicamente activo. “En tiempos históricos presenta al menos 27 eventos eruptivos, siendo el último en 1939. Actualmente el volcán Antuco presenta actividad fumarólica en su cumbre” se indica en un informe del Sernageomin.
Una de la más grandes erupciones se estima habría ocurrido hace unos 10 mil años. Fue este proceso el que colapsó el “volcán antiguo” (también llamado volcán Laja) y comenzó la formación del volcán que conocemos hoy. Esta actividad además tuvo importantísimas consecuencias en la modelación de lo que es hoy la Región de Biobío.
“En uno de esos procesos eruptivos -continúa el relato de Edilia Jaque- los flujos laháricos del volcán rellenaron la depresión intermedia y esos flujos al enfriarse se transforman en una roca totalmente impermeable por lo tanto cuando la red hidrográfica (río Laja) discurren por el territorio sobre las arenas negras que están en esta zona de los Ángeles de la depresión intermedia se inscriben en estas arenas y llegan a esta roca que es mucho más dura”.
Edilia Jaque afirma que “esos cambios de pendientes que hay en esta roca volcánica que se producen ya sea porque son distintos flujos que tienen distintas altitudes generan que el río no se pueda inscribir en la roca y por lo tanto haga este salto. Hoy este salto es una belleza escénica para la región y que tiene una genética del volcanismo regional”, termina.
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